El ritmo de
vida actual tanto familiar como profesional, en los países desarrollados se ha
acelerado. Nos provoca estrés y dificultad para concentrarnos y nos quita la
paz y el tiempo para encontrarnos con nosotros mismos.
Una situación crítica en el trabajo
o un problema personal provoca un alto nivel de estrés. Un cierto grado de
estrés nos permite aceptar y cumplir los retos pero un exceso es negativo.
Sugerencias prácticas para controlar el estrés:
a.
Céntrate
en el momento, en una tarea única y elimina las interrupciones.
b.
Aprende
a decir no. Di no a los plazos imposibles, a los asuntos urgentes que te
impiden ocuparte de lo importante.
c.
Establece
tus prioridades, respétalas y defiéndelas.
d.
Conócete
y toma conciencia de tus limitaciones.
e.
Reconoce
los primeros síntomas de estrés y toma medidas.
f.
Acepta
la realidad. Asume que hay situaciones que no puedes cambiar.
g.
Ten
hábitos de vida saludable: duerme, haz ejercicio y cuida tu alimentación.
h.
Investiga
técnicas para relajarte.