La juventud es un
período de la vida y también un estado del espíritu.
Es fruto de la voluntad y de
la imaginación, de la audacia frente al miedo, y del deseo de aventura frente a
la comodidad.
Los años arrugan la piel,
pero no tener ilusiones, arruga el alma.
Ser joven de espíritu es
tener interés por las personas y aceptar con ilusión los cambios y
oportunidades de la vida.
Serás tan joven como sea tu
confianza en ti mismo y tan viejo como tus temores.
“En
la juventud aprendemos, con la edad comprendemos”.
“La vida es la subida
de una montaña que se ha de subir como un viejo para llegar con el espíritu de
un joven.
“Tenemos el corazón
joven cuando tenemos más ilusiones que recuerdos”.
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