Cuando me planteo alguna vez qué sentido tiene mi vida,
ha
sido siempre cuando he tenido la oportunidad de tener unos
momentos de
reflexión silenciosa, entonces..
- descubro una actitud de admiración a la belleza de la
naturaleza o la bondad de las personas
- tengo conciencia plena del instante
- siento una alegría interior.
Me contaron esta historia:
"Un etnólogo convivía con una tribu australiana para
estudiar
su comportamiento. En una de sus largas caminatas
observó que la
tribu, de vez en cuando, se detenía sin
motivo aparente. Les preguntó por qué
se paraban.
Le dijeron que esperaban a su alma, porque sus almas se
detenían por el camino para mirar, sentir y oír algo que el
cuerpo no había
captado".
Esta actitud contemplativa me ayuda a dar sentido a mi
vida:
Me gustaría que cada persona que esté conmigo salga algo
más feliz, y que
haya contribuido un poquito a que el mundo
que me rodea sea más justo. Cuando
actúo con esta
intención, siento que mi vida tiene sentido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario